diumenge, 10 de novembre del 2013

Reencuentros - 68

68

Learning how to react
I spent, the most of my life.
CATCHING MY BREATH - Kelly Clarkson

"One Di-rec-tion, One Di-rec-tion"
Miré a Louis. Él asintió con la cabeza, reconfortante.
¿Sólo estábamos dentro del coche y ya gritaban? No podía ni imaginarme cómo sería cuando saliéramos.
Suspiré para mis adentros y esperé, intentando tranquilizarme.
Entonces, el chófer nos abrió la puerta.
Cerré los ojos unos segundos para acostumbrarme a la intensa luz que venía de fuera.
- Ya podéis salir -dijo.
Los primeros en salir fueron Harry y Lena. Incluso estando aún dentro del coche, me dolieron los oídos de los gritos.
Luego, Liam y Danielle.
Respiré profundamente, consciente de que nosotros éramos los siguientes.
Miré la alfombra roja por última vez.
Louis me acarició el hombro.
- ¿Vamos? -dijo, con una tierna sonrisa.
Asentí con la cabeza, entrelacé su brazo con el mío, cogí una bocanada de aire y salí del coche.
La multitud me aclaparó instantáneamente. Para tranquilizarme, miré entre las chicas y me imaginé que Lena podría estar entre ellas. 
Podría ser esta de aquí delante. O esa con la pancarta de "Thanks for everything, boys". O la que estaba al lado de la puerta chillando. O aquella de ahí, llorando mientras Liam le firmaba un autógrafo. O esa que al verme, empezó a gritar "Lana".
Rápidamente las otras chicas centraron su atención en nosotros. El grito de la chica se contagió entre las otras y al poco rato para todas habían desaparecido los otros chicos.
"Lana, Lana, Lana, Lana", gritaban las chicas.
¿Lana? ¿Qué demonios significaría eso?
Sonreí al mismo tiempo que agarraba con más fuerza el brazo de Louis y empezaba a andar.
Manteniendo la calma, intento mantener la vista recta, pero mi mirada se va hacia multitud varias veces.
Cuando finalmente entramos por la puerta del edificio, dejando paso a los gritos de "Niall" y "Irish", me dirijo rápidamente a Lena, que me mira con una sonrisa.
- ¿Lena?
- Dime.
- ¿Qué significa "Lana"?
- Eso es un mote. Cuando hay una relación entre dos personas, se hace una combinación de nombres.
- ¿Una combinación...?
Entonces caigo. Eso lo había visto en otras partes varias veces.
Louis y Hannah. Lannah.
- Lo vi en Twitter varias veces.
Lena asintió con la cabeza.
- Gritaban "Lannah". Incluso yo lo he oído.
- ¿Y eso es...?
- Bueno -sonrió Lena.
Era increíble. Yo nunca me habría imaginado encontrarme en esa situación.
Y estaba en ella. Las chicas me conocían. No solo me conocían, sabían quién era. Les gustaba.
Intenté no ponerme a darle vueltas, como hice la última vez.
Esperamos a que entraran Niall con Andrew, cogidos de la mano, y Zayn con Perrie, que no iban cogidos; y subimos.
Una chica, trajeada de negro y con el pelo castaño recogido en un moño, nos acompañó hasta el ascensor, y una vez ahí, hasta la última planta del edificio.
Esta vez, en lugar de escoger una sala grande y cuadrada para hacer la fiesta, habían escogido una azotea con jardín desde la cual se podía ver la ciudad, ya que era un edificio alto.
La azotea estaba orientada de cara a el Thames. Teníamos el London Eye relativamente cerca, y se podía ver también el London Bridge con sus dos torres perfectamente. Y ahí, a la izquierda de la noria gigante, había el Big Ben, con su gran reloj.
- Esto es increíble -dije en voz alta.
- A las doce en punto van a hacer fuegos artificiales desde el London Bridge y el London Eye. Desde esa parte los podremos ver perfectamente -dijo Perrie-. Ah, y el cava, champán, comida, cátering... Viene todo incluido. Si queréis algo, simplemente os acercáis a la barra y lo pedís.
La fiesta era enormemente grande. Había gente por todas partes. En cualquier otra situación, me hubiera resultado caótico, pero esta vez, estaba muy bien organizado.
Perrie se puso a reír, probablemente orgullosa de que su trabajo hubiera salido bien. Luego, se fue andando rápidamente a la barra de madera adornada con lamparitas blancas.
Nosotros nos quedamos quietos, desconcertados por la grandaria del recinto y sin saber qué hacer, al mismo tiempo.
Medio minuto después volvió Perrie, arrastrando de la mano un camarero vestido de negro que nos ofreció amablemente una copa de champán que traía en una bandeja.
Perrie nos fue guiando por el camino de piedra, mientras nos iba presentando a gente.
- ¡Ha llegado! -gritó Perrie, echando a correr hasta una chica morena de pelo largo y castaño que estaba de espaldas a nosotras.
A nuestro ritmo, la seguimos. Perrie le dio dos golpes en la espalda a la chica, que se giró y soltó un grito.
- ¡Perrie!
Las dos chicas se abrazaron tan fuerte que casi caen al suelo.
Cuando se recompusieron y hubieron terminado de reír, Perrie nos acercó a la chica.
- Chicos, chicas. Os presento a mi mejor amiga, Jade.
Jade levantó una mano y se rió.
- Hi -dijo, con una amplia sonrisa.
Perrie y Jade se pusieron a hablar. 
Nosotros estábamos mirándonos, cuando apareció el director del management, Jeff.
Se puso entre Harry y Louis y les colocó las manos en las espaldas, cómo si fueran amigos de toda la vida.
- ¿Qué tal, chicos? ¿Os gusta la fiestuki?
¿"Fiestuki"? ¿Qué clase de adulto decía eso?
- Sí, está muy bien -dijo Liam, intentando romper el velo de incomodidad que se había formado.
- Sí, Perrie ha hecho un gran trabajo -añadió Zayn.
- Sí, ya, ya. Tengo una gran hija -dijo, mirándola. Quitó sus brazos de los hombros de Harry y Louis y se frotó la muñeca antes de mirar a Zayn y añadir-. Vigila lo que haces con ella.
- Señor, nosotros no...
- No se te ocurra hacerle daño -lo interrumpió Jeff, que se dio la vuelta y se fue.
En cuanto se hubo alejado una distancia prudente, echamos a reír.
- Ese hombre está loco -dije, incrédula ante la escena que terminaba de ver.

--
Estuvimos dando vueltas por el jardín, la azotea y la terraza sin rumbo concreto. Perrie nos explicó que no habría cena, sino que había una gran mesa llena de cosas para comer cuando a nosotros nos diera la gana, pero nada formal.
Estuve con los chicos, presentándonos a gente. Estuve con Lena, en el "balcón" de la azotea. Estuve con Louis, en unos columpios que había dentro del jardín. Escapé del laberinto de arbustos junto a Andrew. Incluso estuve sentada con Perrie, Jade y Lena, bebiendo ellas dos vino, yo cava y Lena agua.
A las 11:30, Perrie y Jade nos llamaron y nos obligaron a todos a ir a la parte que tenía un inmenso balcón.
- En cinco o diez minutos empezará el espectáculo, y a las once menos cinco empieza la cerimonia de año nuevo -nos informó Jade.
Cogí a Louis de la mano y fuimos hacia la brandilla.
- ¿Te está gustando la noche? -me preguntó Louis.
- Sí. Esta fiesta es original. Es diferente a las otras. Me encanta.
Me sonrió.
- Me alegro de que te lo estés pasando bien.
*Boom*
El primer petardo nos avisó de que el espectáculo estaba a punto de comenzar.
- Vamos a buscar una copa de champán, corre -dije-. Al tercer petardo empieza, y no me lo quiero perder.
Lo agarré de la mano y nos dirigimos a paso rápido hacia la barra.
- Dos copas de champán, por favor...
*Booom*
Cogimos las dos copas que nos alargaba el camarero y volvimos corriendo a nuestro sitio.
*Booom*
Justo cuando llegábamos.
Me apoyé en la brandilla y miré al Thames, iluminado ahora con luces de colores.
Primero bajó un barco, con un gran número 2 encima.
Luego, bajó otro barco con el número 0.
Luego uno con el 1...
Y un último con el 3.
Luego bajaron más barcos, llenos de gente disfrazada y música a tope.
Cuando terminaron de bajar barcos, el Thames continuó iluminado y la música no cesó.
Miré el reloj del Big Ben: Las 11:53.
Entonces, la música cambió. Los focos se centraron en el London Bridge.
Y, ahí en medio de tanta luz y color, apareció una mujer.
"I hope that you settled down, that you found a girl and you're married now..."
Era Adele. Centramos todos la vista en la mujer de impresionante voz y su increíble versión de su propia canción 'Someone Like You'.
Unos minutos después, terminó y las luces y la música cesaron.
- Waw. Qué voz -me dijo Louis.
- Es increíble.
Ahora, el Big Ben marcaba las 11:57. Tenía dos minutos antes de que empezaran las campanas.
Fui hacia Lena y la cogí del brazo.
- ¿Puedo robártela un minuto? -le dije a Harry.
Él me sonrió y me contestó:
- Pues claro, toda tuya.
La aparté unos metros de los demás.
- ¿Qué ocurre? -me preguntó.
- Nada. Sólo quería decirte... Que sé que las cosas han sido un poco duras hasta ahora. Que no lo hemos pasado especialmente bien. Pero que hemos podido salir de los problemas, y lo hemos hecho juntas. Que sé que es difícil no pensar en qué nos espera en el futuro. Pero, por una sola vez, te pido que te olvides de todo eso y disfrutes del presente. ¿Te ha quedado claro?
Lena sonrió.
- Sí. Lo he entendido. Te quiero mucho, Hannah.
- Y yo. Y sabes que siempre voy a estar ahí para lo que necesites.
La sonrisa se borró por unos instantes de su cara.
- ¿Qué pasa? -le pregunté.
- Yo... Hannah, tengo que contarte algo.
- Adelante.
Lena miró al suelo, respiró hondo y levantó la vista. Ahora lucía en la cara una amplia sonrisa.
- Hannah, creo... Creo que estoy...
El sonido de una campana interrumpió a Lena. No sé si llegó a terminar la frase, pero si lo hizo, no la oí.
Alcé la vista hacia el Big Ben. Treinta segundos para las doce.
- Lena, tenemos que irnos. Luego me cuentas. ¿Juntas? -dije, tendiéndole la mano.
Ella asintió con la cabeza en silencio y me cogió la mano.
- Juntas. Siempre.
Corrimos otra vez hacia los chicos. Me puse rápidamente al lado de Louis.
Dejé mi copa de champán encima de la brandilla.
Me giré hacia mi chico de ojos azules.
*Diez* gritaba la gente, al ritmo de las campanas.
Mirándome, y sin dejar de sonreír, me cogió las dos manos.
*Nueve*.
Le cogí las manos con más fuerza y entrelacé mis dedos con los suyos.
*Ocho*.
Lo miré otra vez a los ojos. A esos ojos tan...
*Siete*.
... azules. Tan captivadores. Tan infantiles. Tan...
*Seis*.
... suyos. Tan perfectos.
*Cinco*.
Por fin llegaba el momento. Parecía que, por primera vez, me sentía a su lado. Como...
*Cuatro*.
... si fuéramos sólo uno. No necesitábamos nada más. Con eso éramos...
*Tres*.
... felices. Y lo sabíamos.
*Dos*.
Lo amaba. Con todo mi corazón. Quería estar junto a él...
*Uno...*
... siempre.
Cerré los ojos y alcé la cabeza rápidamente hasta encontrarme los labios de Louis.
La gente gritaba de felicidad, los gritos de "Feliz 2013" aclaparaban, los estallidos de los fuegos artificiales rebotaban encima de todos los sonidos, las canciones intentaban endulcir ese momento.
Pero poco me importaba a mí todo eso.
Para mí éramos yo y él, él y yo.
"Nosotros".
No existía nada más para mí en ese momento que el amor que me transmitía Louis con ese beso, y el que yo le devolvía a él.
En el fondo, eso era más que un beso.
Era el principio de un nuevo comienzo.
Juntos.
E iba a ser un año muy, muy especial.


--

En otra parte de la azotea, en el mismo momento.
#Narra Perrie#

Me había puesto al lado de Zayn cuando empezaban los fuegos artificiales. Aunque nuestra relación no era como la de los demás, yo también quería demostrarle que estaba ahí para él.
Cuando empezó la cuenta atrás desde diez, mé giré hacia él, mirándolo fijamente.
Sabía que podía contar con él, y él sabía que podía contar conmigo.
Sabía que el año que venía iba a ser un gran año. Intenté imaginarme todo lo que haríamos y todo lo que reiríamos juntos en ese año, pero finalmente decidí que las cosas buenas vienen por si solas.
No importaba lo que nos considerara la gente. Daba igual cómo nos considerábamos nosotros, porque eso era sólo una palabra. Un adjetivo.
Y nuestra amistad era mucho más que todo eso.
"Él es mi mejor amigo. Y lo será siempre..."
Entonces, al mismo tiempo que la última campanada, me besó.
Me sorprendí, pero no rechacé el beso.
Unos segundos más tarde, él se separó de mí y me miró a los ojos.
- No besar a nadie a las doce trae mala suerte -dijo.
Se puso las manos en los bolsillos, se dio la vuelta y se alejó andando, dejándome ahí, indefensa y confusa, en el mismo sitio donde segundos antes me había besado.

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