Capítulo XIX. "Bolita."

-Bolita! No has cambiado eh.-Dice dándome vueltas en el aire.

-¿Y tú sí? Con la manía esa de ponerme motes!-Le respondo. Se encoje de hombros y me sonríe.-Ah, este es Niall, creo que lo sabes.-Río y ellos se saludan. Mark coge una silla y se sienta enfrente de Niall y mío.

Hablamos sobre los últimos años, sobre anécdotas del pasado y sobre el futuro. Nos tiramos como una hora hablando, hasta que Mark pega un salto en la silla.

-Ostia, toma Bolita, es una tontería, pero me hacía ilusión. Pero, primero, ¿recuerdas el día de la pizza?

-Como no…- Es día, fue el mejor.

Flashback.

-¡Buenos días Mark!-Le abracé y le di dos besos y me senté en el sofá.

-¡Buenos días Rosita!-¿Por qué rosita? En ese tiempo llevaba californianas rosas, y ese era el primer día que las llevaba. – ¿Te hacen unas pizzas?

-¡Claro que sí!

Me levanté del sofá y caminamos hacia la puerta. Salimos y rodeé su cintura con mi brazo. Él me rodeó con su brazo a través de los hombros, y comenzamos a caminar. A medida que llegábamos a la pizzería íbamos haciendo más el burro. Nos paramos en un pequeño centro comercial, y dimos un par de vueltas. Nos paramos en muchas tiendas, pero me quedé mirando una tienda de antigüedades. Había un precioso collar, era un corazón echo de unas alas. Sin pensarlo dos veces me metí en la tienda. La tienda  era acogedora, y en el mostrador estaba una mujer algo mayor, con la cara cansada, pero feliz. Le sonreí y fui hacia ella.

-Buenos días, ¿me puede enseñar ese collar?-Dije señalándolo. Asintió y lo trajo.

-Puedes abrirlo, y poner una foto.-Me dijo ella.

-Es precioso… ¿Cuánto vale?

-150 libras.

-Erh, lo siento. No puedo comprarlo. Gracias igualmente. Adiós.-Volví a sonreírle y salí de la tienda. Mark y yo caminamos hacia la pizzería, y ya ahí sentados volví a hablar.-Mark, me han dicho que sí.

-Espera, ¿en qué?

-En el X-Factor. Me voy Mark, voy a ir a cumplir mi sueño.

Él se levantó de golpe y me abrazó. Lloramos juntos, y me susurró.

-¿Cuándo?

-Me queda una semana…

Fin del flashback.

-Pues te he traído un regalo. Ábrelo.

Abro y veo el mejor regalo del mundo, el collar.

 Abro las alas, y hay una foto de Mark y yo el día que me fui. Salgo dándole un beso en la mejilla, y él sonriendo. En una esquina pone: “Te quiero ardillita.” Sí. Desde un principio me llamaba ardillita, por mi pelo. Llorando me acerco a él y le abrazo.

-Eres lo mejor tío. Te quiero Marcus.

-No me llames así. Te quiero más ardillita.

*Narra Niall*

Vale, sé que son mejores amigos y tal. Pero los celos me están matando por dentro. Ellos acaban de abrazarse, se pasan números de teléfono y él se tiene que ir. Le doy un abrazo de tíos y se va.

-Gracias Niall, enserio.-Me dice ella.

-De nada tonta, no es nada.-Ella me sonríe y nos vamos a casa. Caminamos lento, uno al lado del otro sin decir nada. En realidad la quiero pero no quiero joderlo todo.

|2 DÍAS DESPUÉS|

Entro corriendo a la casa de Liam y _____, tengo ganas de decirle que en poco tiempo conoceremos casi todo el mundo. Liam me abre, y, corriendo también, me voy a su habitación. Al abrir me encuentro la peor visión del mundo. _____ y Mark están tumbados en la cama de ella. Él lleva un pantalón, y ella una camiseta grande. Los dos se están riendo y paran de reír cuando me ven. Ella se levanta, aún sonriendo, y hace un intento de abrazarme. No dejo que lo haga y salgo corriendo.

No sé que hago, solo huyo de eso. Sé que tal vez estoy pensando fatal, pero estoy seguro de que ellos han hecho algo. Noto una mano tras de mí y es ella, vestida en condiciones.

-Niall, ¿qué te pasa?

-¿Que qué me pasa? Me pasa que no te das cuenta que me da rabia veros a ti y al tal Mark abrazados y esas cosas.

-Joder Niall, es un mejor amigo que no veo de hace un par de años.

-Sí, pero no es excusa para que te lo folles, ¿no?

-¿Así que piensas eso?

-Pues sí.

-Pues vaya mierda. Porque no hemos hecho nada, y lo sabes bien.

-¿Pero qué quieres que piense?

-Yo que sé Niall. Joder. Intento estar bien contigo y lo lías todo. ¿Te quiero sabes? Me duele un montón que hagas estas cosas.

-Vale. Me voy. Adiós.

-Ten cuidado…

-Sí, sí. Lo que digas.

Corro por las calles de Londres como un niño pequeño. El Big Ben, el ojo de Londres, y mil tiendas con mi cara y con la suya. Comienzo a llorar sin dejar de correr y de un momento al otro, dejo de ver bien. Intento abrir los ojos y lo veo todo borroso. Y ya no veo nada más. Tan solo una pequeña luz blanca disuelta en un mundo negro.

GENTE PRECIOSAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA, OS GUSTA? VALE, SÉ QUE SÍ e.e ME DEBÉIS UN APPLAUSE PORQUÉ HE ESCRITO VIENDO LOS EMA. EN FIN, AYER NO SUBÍ PORQUÉ FUÍ A BARCELONA, Y LLEGUÉ MUUUUUY TARDE. EN FIN. SUS LOVEEEEEEEEEEEEEEO<3<3<3<3<3<3

-Andrew'