Levanto la vista hacia la ventana y observo la preciosidad de ciudad que yace bajo mis pies. Londres. La preciosa Londres a la que solo que tenido honor a visitar una vez. Fascinada, veo el Big Ben y el London Eye. Escucho a la azafata avisar de que nos hemos de abrochar los cinturones y la obedezco rápidamente. Agarro fuertemente la mano de Harry y cierro los ojos. Odio eso de aterrizar con un avión. Escucho una escandalosa risa. Sin dudarlo dos veces miro al Irlandés que tengo a mi izquierda y le fulmino con la mirada. Intenta aguantarse la risa mientras me dice:
-Lo, lo siento. Es que... No habia visto a nadie ponerse taan nerviosa por un aterrizaje.
-Ya, ya.
-Que sí, mírame.- Sigo con los ojos cerrados.- Vamos, mírame.-Dice tiernamente. No me puedo resistir a esa voz y abro los ojos. Le suelto la mano a Harry, ya que sigue durmiendo y no me hace caso. Le miro directamente a sus penetrantes ojos turquesas y disparo.
-¿Qué?
-Nada. Tal solo relájate.-Hago el intento de volver a mi antigua posición y me interrumpe- ¡No! No dejes de mirarme. Concéntrate en mis ojos.
Vale. Eso no me lo esperaba. Sonrío y hago lo que me ha pedido. Me concentro en su color de ojos. Un turquesa que desprende dulzura y ternura. Amor y confianza. Sí, definitivamente me he perdido en sus ojos. Entonces, él coje y se quita el cinturón.
-¡Niall!, ¿¡Qué haces!? ¡Te vas a matar!
-Ya hemos aterrizado.
-¡¿QUÉ, QUÉ!?
-Eso, jaja, vamos espavila que la gente ya está saliendo.
Me levanto rápidamente de el asiento, cojo mi mochila y bajamos del avión.
-Oye chicos, ¿sabéis en que estoy pensando?
-Creo que piensas lo mismo que Niall...-Dice Harry.
-¡TENGO HAMBREE!-Decimos Niall y yo a la vez, así que empezamos a reir a carcajada limpia y la gente nos mira, intentamos no ser reconocidos, pero es un poco difícil no serlo. Así que de un momento al otro estamos los tres corriendo y riendo delante de una horda de fans. Finalmente, entramos a una pequeña cafeteria. Harry pide una simple Fanta de Naranja y una bolsa de patatas normales. Niall pide leche con cacao y una pasta de chocolate. Yo me limito a pedir lo mismo que Niall. Nos sentamos sin decir nada y comemos. Justo cuando acabo suena el teléfono de Harry. Lo coje y se va hacia el baño para hablar tranquilamente.
-Denada eh.-Dice Niall mientras gira la cabeza y posa sus ojos en mi.
-Graaaaaaaacias.-Digo casi chillando. Empezamos a reirnos y acabamos abrazados, tal y como estábamos en el avión.
-¿Recuerdas como llegó esa sudadera a ti?
-Perfectamente. Fué la segunda vez que fuimos al bungaloow de mi padrastro. Yo dormia contigo, Liam y Louis. Era temprano por la mañana y me la dejaste por primera vez para ir a comprar el desayuno. Después, cuando nos sentamos alrededor del fuego me la volviste a dejar. Finalmente, cuando fuimos de viaje promocional me la diste. ¿Me acuerdo o no?
-Te acuerdas perfectamente.
Escuchamos la puerta del baño nos separamos rápidamente.
-Nos espera Paul fuera del aeropuerto, dice que ya tienen nuestras maletas en el coche. Corred lo más que podáis!!!
dilluns, 29 de juliol del 2013
Capítulo III. 'Rebelión en el aeropuerto'
Subscriure's a:
Comentaris del missatge (Atom)
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada