Louis y yo estuvimos hablando un rato, os copiaré la
conversa:
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Yo: Qué ilusión me hace que aún te acuerdes de mí :)
Él: ¿Qué pensabas? Por mucho que haya viajado y conocido a
gente nueva, ¿por qué te iba a olvidar?
Yo: No lo sé… Es que me comporté muy mal contigo, y bueno,
pensé que…
Él: Mujer, no te preocupes, que el pasado pasado está y hay
que centrarse en el futuro ;)
Yo: Ya… Pero que sepas que lo siento, ¿vale?
Él: Disculpas aceptadas. Y ahora que ya volvemos a ser
amigos, ¿te apetece que algún día vayamos juntos a tomar un café?
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Ese mensaje me sentó… Me quedé con los ojos y la boca
abiertas, no podía ser que… Me olvidé de como respirar, me sentí incapaz de
gritar, de llorar, de reír, de saltar… No me podía mover. Me había quedado
clavada en mi silla. Me llevó un minuto asumirlo, luego suspiré, y en mi cara
se dibujó una gran sonrisa.
- ¡UEEE!
Ese fue un grito inconsciente, me tapé la boca con la mano y
deseé no haber despertado a Lena, así que acerqué la cabeza para comprobarlo, y
vi que mi amiga se estaba incorporando.
A toda prisa, cerré la pantalla del portátil, y, intentando
no hacer ruido, corrí hasta la cocina.
Lena ya se había incorporado, miró a su alrededor, y cuando
me vió en la cocina, me miró con ojos somnolientos y susurró:
- Hann… ¿Qué… Qué haces despierta?
- Nada. Yo solo… me levanté. Tenía… sed. Y vine a buscar un vaso
de agua.
- Ah…
- Vamos, vuelve a dormir. Ahora vendré, yo.
- Vali.
Esperé unos minutos en la cocina, y cuando estuve segura de
que ya se había dormido, volví al comedor y abrí otra vez la pantalla del
portátil.
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Él: ¿Hannah?
Él: Contesta…
Él: Perdona, ¿he sido demasiado directo?
Él: No pretendía ofenderte.
Él: Bueno, pues si no me contestas...
Yo: Perdona, perdona. He tenido que ir a hacer una cosa.
Él: Uff, vale. Entonces, a lo del café…?
Yo: Me encantaría tener el honor de salir a tomar un café
con sir. Louis Tomlinson :P
Él: Anda, no me hables así, que me haces sentir viejo jaja
Yo: Cómo quieras ;) ¿Cómo quedamos?
Él: En el café que más te guste, el día que te vaya bien, a
la hora que te vaya bien.
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Me reí. A pesar de todo, seguía siendo mi Louis de siempre.
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Yo: Bueno, pues… ¿Al Starbucks de Doncaster, el viernes por
la tarde, hacia las 5? Así te pasas por la ciudad.
Él: Me va perrrfecto. Allí nos vemos xx
Yo: ¡Adióos!
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Sonreí, emocionada, cerré el portátil y volví lentamente
hacia mi saco, y me puse a dormir al costado de Lena.
¿Cómo le contaría que había quedado para ir a tomar un café
con su ídolo?
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